¿Cómo ser buen líder para tu empresa?
Desde hace un tiempo me dedico a preparar líderes para ¡ejercer todo su potencial!
Pero no de cualquier manera sino desde una perspectiva integradora, ya que ser líder requiere haber completado un gran conjunto de habilidades de Inteligencia Emocional y Cognición a partes iguales.
Para mí ser líder es una palabra con ¡fuerza! Me invita a querer actuar, hacer algo, motivarme, ser fuerte, autorrealizarme, dominarme y aprender a formar un conjunto para nutrirme de él y hacer que otros se nutran de mí de forma sana.
En este artículo te cuento los atributos principales que te convierten en un GRAN líder.
Más adelante iré realizando explicaciones más exhaustivas con gran lujo de detalle y te daré algunas pautas y técnicas, para que las puedas aplicar en tu empresa.
¿Verdaderamente amas lo que haces?
Seguramente cuando tienes que liderar una empresa y tienes un equipo de trabajadores a tu cargo, el nivel de estrés y de responsabilidad puede superar al nivel de vocación inicial. Incluso aparecerán momentos de crisis en los que te plantees un sinfín de preguntas, tu cabeza será una lavadora de dudas, miedos e inseguridades y decidas tirar la toalla. Pero, hazte esta pregunta: ¿de verdad amas lo que haces?
Si la respuesta es sí ¡a qué estás esperando a motivarte y crecer en tu desempeño!
Si la respuesta es no... ¡Tranquilidad, no está todo perdido! ¡Aún hay solución para reestructurarte tú y a tu equipo!
Amar lo que haces significa ilusionarte por tu trabajo, querer ser mejor en él, actualizarlo, anteponerlo a las crisis, elevarlo. ¿Cómo sacas esa fuerza? Porque tu sueño se impone ante ti y no te deja en paz hasta que lo realizas y le das Alas para volar.
¿Eres independiente?
Nadie dijo que hubiera que empezar rápido o que fuera a ser fácil el camino de formar un equipo o forjar una empresa. Si quieres ser un verdadero líder no esperes a que nadie te apoye. Ni amigos, ni familia, ni pareja... ¡Sé tú! Independiente, valiente. Por Amor a lo que realmente te da sentido a TI. Esa es la primera manera de liderar: "liderarte a ti mismo o a ti misma". Los apoyos externos te darán una motivación extra pero aprender a ser agente de tu propia motivación, ¡es reto de líderes verdaderos!
Este gran paso te hará ganar en seguridad, cualidad esencial si quieres ser buen líder. Nada más nutritivo que darte el permiso de creer en ti.
¿Tienes buena Autoestima?
"No valgo..."
"No sé si voy a ser capaz"
Algo que genera muchos conflictos tanto para ti como para tu entorno es el hecho de tener una autoestima insana. La autoestima insana se puede manifestar de múltiples maneras, y su origen puede ser tanto de forma consciente como inconsciente. Puedes hacer proyecciones -sin darte cuenta- sobre tus empleados, sentirte inferior e incluso, generar conflictos sin querer o sin imaginar el alcance de mal rollo que puedes generar.
Al mismo tiempo, puedes convertirte en un líder castigador, despótico, humillador, del que todos huyan. No te darás cuenta del grado de negatividad que puedes provocar en tu entorno cuando te dejas gobernar por esa autoestima a la que le hace falta un poquito de mimo y cuidados.
Asemeja tu autoestima a una planta que debes podar, regar y cuidar para que no se estropee.
¿Te sientes autorrealizado o autorrealizada?
Muchas veces, cuando hacemos las cosas de forma sistemática o por rutina, ganamos en la perspectiva de la normalidad. Esa normalidad provoca una seguridad que nos lleva a querer controlar todo. Ese control nos da poder. Y vuelta a la seguridad. Pero en todo este proceso perdemos algo esencial: nuestra perspectiva. La nuestra propia. No la del vecino, de la de tus padres, amigos... La tuya. Y dejamos de sentirnos autorrealizados.
Si te aburre lo que haces y no encuentras una motivación, es posible que tu nivel de liderazgo decaiga, que tus empleados se te echen a la chepa o que, simplemente, entres en un círculo vicioso del que no sepas cómo salir y veas tu sueño roto en pedazos.
La monotonía engancha porque alimenta la zona de confort. Pero salir de ella te convierte en una persona nueva. Te enseñará a aprender cosas nuevas, conocer distintas personas de las que poder aprender y enseñar... Te nutrirá en novedad. Y esa novedad te acercará más a tu éxito, te reconciliará contigo mismo y el fracaso dejará de amenazarte a cada instante.
¿Eres de ahogarte en un vaso medio vacío?
Nadie puede controlar las circunstancias por las que la vida le hará atravesar. No sabemos lo que puede ocurrir en el minuto que viene. Somos grandes desconocedores. El desconocimiento nos lleva a experimentar incertidumbre, y la incertidumbre, a querer controlar. Si tiendes a ver el vaso medio vacío, nunca estás conforme con el trabajo que realizas, te quejas a menudo, no fomentas las capacidades de tus empleados, te aíslas, no escuchas alternativas y, sobre todo, te ahogas constantemente sin aplicar soluciones, es posible que tu árbol nunca crezca o le cueste crecer más que a los demás.
Por ello, un recurso para salvar esta contingencia, es el hecho de tomar conciencia y consciencia de tus emociones y de tus límites para establecer recursos que te ayuden a solventar tus amenazas para crear una energía fluyente que haga prosperar tu negocio.
Una de las problemáticas que siempre me encuentro, es el miedo al cambio. Pero no es este miedo lo que paraliza al líder sino la resistencia a él. Y esa resistencia, genera miedo. Algo que frena por completo la producción y estanca al equipo.
¿Tienes carisma?
Tener carisma no significa que subas a las redes cien mil fotos de tu rostro, de tus logros, de tus diplomas o presumir ser amigo o amiga de nadie. Generalmente, ese tipo de contenido cansa a la audiencia. En este tipo de vinculaciones las relaciones no son por calidad sino por cantidad. Escasea la autenticidad y se busca adherir al pez más gordo. Es lo que solemos llamar "por el interés te quiero, Andrés" o arrimarse al árbol que más sombra cobija. Algo que machará la autoestima e incluso puede desembocar en otros problemas de personalidad mayores. Algo que, a día de hoy, está ocurriendo con una alta incidencia.
Ser carismático significa ser sencillo y honesto, real, ético, justo veraz. Tener sencillez en actos y palabras.
Valorar a los empleados por sus características favorables y ayudar con las limitaciones que puedan presentar, podría ser una opción realmente integradora. Por otro lado, impregnar el trabajo con una cierta cercanía sana hacia las personas que lideras, mostrarte flexible y generar una bidireccionalidad líder-empleado, te hará ganar muchísimo en producción.
¡¡¡Cuanta más efectiva sea tu producción más alto será tu rendimiento!!!
Todo ello no debes hacerlo NUNCA para ser reconocido como el mejor o la mejor o para ser querido o querida. Es decir, si no lo sientes, no te esfuerces en fingir algo que no eres. Lucha y trabaja por conseguir esa autenticidad. Impostar provoca artificialidad y te aseguro que es un seguro para que tu empresa no salga a flote.
Atraerás y generarás un buen clima porque serás REAL. Y la realidad es el mayor atributo que te hará escalar a lo más alto. Y, por tanto... ¡¡¡¡Ser un genio en liderar!!!!
Ana G.E. Robles - Terapeuta Holística y Comunicadora en Radio España ©
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